Sunday 23 April 2017

BIBLIOTECAS EGIPCIAS, ¿"TESOROS DE LOS REMEDIOS DEL ALMA"? 📚

[He pensado transferir algunos de los posts que he ido haciendo en la página de Facebook al blog para que puedan ser revisados de forma más cómoda. Como hoy es el Día del Libro, traigo este post del pasado 12 de marzo sobre bibliotecas egipcias]  

Mi idea hoy era compartir con vosotros un post sobre un curioso epíteto del dios Thoth, pero lo voy a postponer para responder por aquí a una pregunta que me ha hecho Ulises Russell, ya que creo que os puede resultar interesante (al fin y al cabo, las bibliotecas son uno de mis temas predilectos, y no dejamos de lado tampoco al dios Thoth). Ulises me pregunta lo siguiente: "Hola Marina. ¿Es cierto que en Egipto a las bibliotecas de las llamaba "el tesoro de los Remedios del alma? ¿ o es un mero invento de Internet? Muchas gracias! Y disculpas por la molestia!" A lo que se refiere Ulises es a un texto que probablemente muchos hayáis visto circulando en Internet, generalmente sin referencias, que dice lo siguiente: "En Egipto se llamaban las bibliotecas el tesoro de los remedios del alma. En efecto, curábase en ellas de la ignorancia, la más peligrosa de las enfermedades y el origen de todas las demás." Se trata de un fragmento de la obra 'Discours sur l'histoire universelle', del teólogo francés Jacques Bénigne Bossuet, escrita en 1681. La fuente utilizada por Bossuet, no obstante, es mucho anterior. Si vamos a la Biblioteca Histórica de Diodoro Sículo, libro I, 49.3, leemos lo siguiente, en su descripción del Ramesseum en Tebas: ἑξῆς δ᾽ ὑπάρχειν τὴν ἱερὰν βιβλιοθήκην, ἐφ᾽ ἧς ἐπιγεγράφθαι Ψυχῆς ἰατρεῖον ("Y a continuación está la biblioteca sagrada, sobre la que está inscrito «(Lugar de) remedio del alma»". La traducción es mía).

¿Pero era esto cierto? Las bibliotecas en el Egipto antiguo recibían el nombre de pr-mDA.t (per-medjat), literalmente "casa de libros". Tenemos un ejemplo de una pequeña cámara llamada así en el templo de Edfu, en la primera sala hipóstila, donde hay un listado de títulos de libros inscrito en sus paredes. Las instituciones de conocimiento donde se copiaban los libros, no obstante, eran llamadas Casa de la Vida (pr-anx "per-ankh"), y para acceder a ellas era necesario pasar por un proceso de iniciación a los misterios de la escritura que está recogido en el Libro de Thoth, conservado en una serie de papiros demóticos. En él y en otros textos los libros son llamados bA.w-ra (bau-Ra), es decir "almas de Ra". Dado que la Casa de la Vida parece haber estado también asociada a los rituales de regeneración de Osiris, como se deduce a partir de la representación en el papiro Salt 825 o en el Libro de El Fayum, es posible que la noción de "remedio del alma" se haya derivado de las explicaciones de los sacerdotes egipcios sobre este tipo de rituales, y sobre el contenido de muchos de los papiros conservados en la biblioteca. La lectura de la inscripción quizá derive de hecho del término pr-ankh. 
Sobre bibliotecas reales, son pocas las que han llegado hasta nosotros. Una excepción es la del templo de Tebtunis, en El Fayum, donde encontramos textos de muchas clases, desde tratados científicos (como textos astronómicos y astrológicos) hasta textos literarios, que probablemente en muchos casos eran considerados como relatos históricos.

IMÁGENES

1-4: Estas fotografías las tomé en mi última visita a Edfu, en 2014. En ellas podéis ver el pr-mDA.t o biblioteca del templo. Se trata de una pequeña cámara adosada a uno de los muros que cierran la primera sala hipóstila y la separan del patio. En la primera imagen veis el exterior de la cámara. La segunda y la tercera están tomadas en el interior con una linterna. En ellas veis al dios de la sabiduría y la escritura Thoth, y en la segunda, al final de la inscripción, el nombre de la cámara, pr-mDA.t, escrito con el signo de la casa (pr) y el rollo de papiro en su interior (mDA.t). En la cuarta foto tenéis un detalle de la parte superior de la puerta, donde está grabada una paleta de escriba con dos tinteros con el signo Sn (para más información sobre los tinteros y este signo, podéis acudir al siguiente post: https://www.facebook.com/egyptologicalbibliophile/photos/a.114187565624035.1073741828.106192123090246/385280471848075/?type=3&theater).





5: Representación de la Casa de la Vida en el papiro Salt 825, con Osiris momiforme en su interior. Fuente: R. Jasnow y K-Th. Zauzich (2014): Conversations in the House of Life. A New Translation of the Ancient Egyptian Book of Thoth. Wiesbaden: Harrassowitz Verlag, p. 44, fig. 14.




Sunday 16 April 2017

¡Un libro enterrado a los pies de la estatua de Anubis! Una referencia egiptológica real oculta en La Momia (1999)

Evelyn en la vida real...

Ésta es más o menos mi cara de emoción cada vez que consigo descifrar un signo nuevo en los papiros que estudio (Copyright: Universal Studios)

Hace unos días, en mi página en Facebook, os comenté que una de las películas que me marcaron desde jovencita fue La Momia (1999) (podéis leer el post aquí). Como os decía allí, cuando salí del cine a los 12 años me propuse (más aún, pues por entonces ya estaba enamorada de Egipto) convertirme en una Evelyn real, trabajar en Egipto, y ser capaz de "leer y escribir jeroglíficos y hierático", como dice ella en la escena de la biblioteca al comienzo de la película. Desde entonces, y a medida que fui aumentando mis conocimientos egiptológicos, he ido escudriñando la película plano a plano, descubriendo toda una serie de detalles que suelen pasar desapercibidos. Pese a las licencias cinematográficas propias de cualquier producción de Hollywood, el equipo que hizo la película contó con asesoramiento egiptológico, y al parecer algunos detalles más "especializados" entraron en el guión final de la película. El más evidente es la introducción de diálogos en lengua egipcia, que fueron traducidos por el egiptólogo Stuart Tyson Smith, el mismo que tradujo también los diálogos en la secuela, El Regreso de la Momia (2001) y anteriormente Stargate (1994) [1]. Hoy os quiero traer un detalle que podría parecer una invención de la película, pero que tiene raíces puramente egipcias.

Situemos la escena

Si recordáis la película, la introducción de la misma tiene lugar en el Egipto del Reino Nuevo, y nos muestra el asesinato ficticio del rey Seti I por su sumo sacerdote Imhotep [2] y la concubina real Anakhsunamun [3]. Tras ser descubiertos, ella se quita la vida, e Imhotep huye con sus sacerdotes, roba su cuerpo, y prepara un ritual para devolverle la vida [4]. Este ritual es interrumpido por la guardia del rey e Imhotep y sus sacerdotes son condenados a ser momificados en vida. Imhotep es depositado en un sarcófago con escarabajos comedores de carne, encerrado, y enterrado bajo una estatua de Anubis. Y aquí está el elemento que hemos de recordar, la estatua de Anubis.

La guardia Medjai enterrando el sarcófago de Imhotep a los pies de la estatua de Anubis, cuya base podéis ver en la parte superior de la imagen (Copyright: Universal Studios)
Estatua de Anubis (Copyright: Universal Studios)
Estatua de Anubis durante la Batalla de Hamunaptra (Copyright: Universal Studios)

Cuando la película nos lleva a los años 20 del s. XX, aprendemos de Evelyn, nuestra bibliotecaria y aspirante a egiptóloga, que su sueño desde niña ha sido encontrar un libro (¡otra cosa que tenemos en común, yo siempre soñé con hallar papiros con textos perdidos!), el libro de Amón-Ra, que según la leyenda se encuentra enterrado en la Ciudad de los Muertos, Hamunaptra [5]. Este libro estaría enterrado, según Evelyn ha podido averiguar en sus investigaciones, bajo los pies de la estatua de Anubis. A medida que avanza la película, vemos que lo que descubren debajo de esta estatua es el sarcófago de Imhotep, y un cofre con cinco (?) vasos canopes y el Libro de los Muertos, que es, curiosamente, un libro en formato códice, y no un rollo de papiro como esperaríamos en el Reino Nuevo, ya que los primeros libros en formato códice aparecieron en el s. I d. C. [6]. Es interesante, no obstante, que la página de la que lee Evelyn, y que hace que Imhotep regrese a la vida, es una copia del capítulo 151 del Libro de los Muertos. En las imágenes inferiores podéis comparar una captura de pantalla de la película con una imagen de parte de dicho capítulo en el Libro de los Muertos de Ani, actualmente en el Museo Británico:

Libro de los Muertos siendo leído por Evelyn (Copyright: Universal Studios)
Facsímil de parte del capítulo 151 del Libro de los Muertos
de Ani, actualmente en el Museo Británico
(Fuente: O. Goelet, R. O. Faulkner, C. A. R. Andrews, et al. (2015, 3a ed.): The Egyptian Book of the Dead. The Book of Going Forth by Day, San Francisco: Chronicle Books, lam. 33-B)


Tras devolver a Imhotep a la vida y desencadenar las diez plagas bíblicas, Evelyn ha de solucionar la situación y, volviendo al Museo de El Cairo, descubre (leyendo una estela que recuerda ligeramente a la Piedra de Rosetta), que el Libro de Amón-Ra, necesario para devolver a Imhotep al inframundo, ha de encontrarse bajo los pies de la estatua de Horus. Pero, ¿qué es todo esto de que haya libros bajo las estatuas?

Evelyn descifrando la localización del Libro de Amón-Ra en una estela sospechosamente parecida a la Piedra de Rosetta
(Copyright: Universal Studios)


Libros enterrados bajo los pies de estatuas

Pese a que pudiera parecer un elemento creado apropiadamente para la película, lo cierto es que en los textos egipcios antiguos leemos ya sobre libros enterrados en distintos lugares, y entre ellos también bajo los pies de estatuas. De hecho, el presentar un texto como procedente de un manuscrito antiguo hallado entre las ruinas de un templo era una forma de darle prestigio. Ejemplos famosos de este recurso los tenemos en textos como el Libro de los Muertos, en los capítulos 30B, 64, 137A o 148, cuyo texto dice que fueron encontrados por el príncipe Hordedef, hijo de Khufu, en tiempos del rey Menkaure. Además, el capítulo del Libro de los Muertos Pleyte 166 dice haber sido encontrado alrededor del cuello de la momia de Usermaatre, es decir, de Ramsés II. Estas atribuciones, obviamente, tenían como objetivo dar pedigree a los manuscritos, y no debemos asumirlas como reales. Pero pasemos al texto que nos ocupará hoy:

P. Berlin 3038, columna 15 (Fuente: http://www.medizinische-papyri.de)

En la imagen superior podéis ver una fotografía de la columna 15 del papiro médico P. Berlin 3038, también llamado Papiro Brugsch, ya que fue el egiptólogo Heinrich Brugsch quien primero lo describió. Este papiro, que data de la XIX dinastía (Reino Nuevo), está escrito en hierático, utilizando tinta negra para el cuerpo del texto, y roja para destacar el comienzo de cada parte. Nos vamos a centrar en la primera línea de esta columna, que corresponde a la fórmula §163a, y que os presento en la fotografía de la edición de Wreszinski de 1909, que podéis descargar gratuitamente aquí. Debajo tenéis la transcripción jeroglífica de la línea.





El texto dice lo siguiente:

HA.t-a-m dmD.t n.t hA.t wxd.w gmj.t m sXA.w js.wt m hnw Xr.t-a Xr.j rd.wj jnpw

"Comienzo de la compilación de la retirada del dolor, encontrada en las antiguas escrituras en una caja de utensilios de escritura, bajo las piernas de una estatua de Anubis".

(Tanto la transliteración como la traducción son originales mías)

En otro papiro médico, el papiro Ebers, encontramos también otra fórmula hallada bajo los pies de una estatua de Anubis (columna 103, §856a). Volviendo a P. Berlin 3038, el texto introducido por la frase que hemos leído fue supuestamente hallado en una caja para guardar los utensilios del escriba escondida bajo las piernas de una estatua del dios Anubis. En la película de La Momia vemos cómo en la base de la estatua de Anubis se halla un arcón en el que se encuentra el Libro de los Muertos y los vasos canopes de Imhotep:

Extracción del arcón que contiene el Libro de los Muertos y los vasos canopes de Imhotep. La base de la estatua se encuentra al fondo de la imagen  (Copyright: Universal Studios)

Desconozco si la introducción de este detalle en la película fue a propósito, derivada del asesoramiento egiptológico, o si se trata de una afortunada casualidad, pero la localización del Libro de los Muertos bajo la estatua de Anubis en La Momia, como hemos podido comprobar, responde por completo a la tradición egipcia antigua real. Es un detalle, no obstante, que pasará desapercibido a todo aquél que no esté familiarizado con los textos egipcios antiguos.




NOTAS

[1] Si queréis saber más sobre el proceso que el profesor Stuart Tyson Smith siguió para la traducción, podéis leer un artículo al respecto en el siguiente enlace. Aparece en la parte inferior de la página, en seis páginas escaneadas.

[2] El más famoso Imhotep (ij-m-Htp, cuyo nombre significa "aquél que viene en paz") fue el arquitecto de la pirámide escalonada de Saqqara (reinado de Djeser, III dinastía). Fue considerado, junto con Amenhotep hijo de Hapu, uno de los mayores sabios a lo largo de la historia egipcia, y fue convertido ya en la antigüedad en un personaje de ficción, protagonista de al menos un relato demótico, en el que se enfrenta, anacrónicamente, a una hechicera asiria (P. Carlsberg 85).

[2] Ésta es la vocalización sugerida en la película para el nombre anx⸗s-n-jmn, cuyo significado es "Ella vive para Amón".

[3] Este tipo de rituales mágicos aparecen a menudo en la literatura egipcia, especialmente en la demótica, así como en los papiros mágicos, pero generalmente era un regreso a la vida muy breve, para revelar las circunstancias de su muerte.

[4] Pese a que Hamunaptra no es un nombre egipcio, sí que es una ciudad real, pero perteneciente a otra cultura, la cultura del Valle del Indo. Su nombre significa "Ciudad del Hombre Muerto", y fue hallada en la década de los 50 del siglo XIX. Curiosamente, en 2009 escribí un post al respecto en el foro de Amigos de la Egiptología, bajo el pseudónimo de Evelyn. Lo podéis leer aquí.

[5] En otro post quiero hablaros de algunos de estos primeros códices, los textos gnósticos de la llamada biblioteca de Nag Hammadi.